Desde las comunidades bugle en la montaña, hasta la ciudad de Santiago, los mares protegidos de Coiba y el pueblo católico de Atalaya, esta parte de la provincia de Veraguas es un núcleo de diversidad ecológica y cultural en el centro de Panamá. Aquí se puede encontrar playas remotas y salvajes con enormes que atraen surfistas de todo el mundo. En sus montañas los campesinos conservan sus costumbres y tradiciones que impregnan la cultura del lugar.